|
||||||||||||||||
Reunidos en la sede de la Fundación Francisca Mateos, Lucha
por la Paz, con objeto de exponer, analizar y concluir sobre las
gestiones realizadas para la ubicación definitiva del proyecto Museo
Lucha por la Paz. Concluimos: El proyecto del Museo ha sido ampliamente divulgado por la geografía del país, en formato libro, por medios telemáticos y orales. Hemos presentado nuestra propuesta del Museo Lucha por la Paz a numerosos Ayuntamientos de la geografía española. Hemos sido recibidos por toda clase de concejales, la mayoría cargos políticos sin capacidad o voluntad política para analizar o valorar proyectos culturales. Hablar de Paz, de Valores, de Educación, de Cultura, de Convivencia y de Solidaridad no parece encajar en la mentalidad de algunas instituciones, que prefieren pensar en el corto plazo o en políticas populistas para asegurarse una reelección en los cargos. Algunos responsables, que ni siquiera se han tomado la molestia de leer el proyecto, se atreven a plantear la duda de la Utilidad Pública del proyecto. Otros hacen la traducción del proyecto a cifras, para llegar a la conclusión de no disponer de fondos. En un par de casos se han limitado a pedir un nombre de contacto y un teléfono, para establecer un futuro contacto que nunca ha existido. Como nexo común a estos comportamientos impropios siempre está el tema de la financiación, que está presente en cada reunión con poderes públicos antes incluso de empezar a conversar, sin conocer la propuesta que se va a realizar o la trayectoria de nuestra Fundación, que nunca ha recurrido a dinero público. Por una razón u otra, notamos que muchas ciudades sufren una preocupante falta de orientación y planificación a medio-largo plazo. Es un mal endémico que azota la Cultura y la Educación de todo el país, víctima de la partitocracia. En la presentación de nuestro proyecto ante los ayuntamientos, éstos pretenden resultados inmediatos con la menor implicación posible, y notable repercusión mediática. Quedan sorprendidos del contenido que se ofrece (gratuitamente) pero reculan cuando, en lugar de venir con dinero para comprar-invertir, se les solicita el uso de un edificio municipal en desuso. Los "pelotazos urbanísticos" que ha sufrido nuestro país los han realizado grandes empresarios que han construido ostentosas edificaciones, sin uso o utilidad predefinida. El dinero demuestra ser una llave maestra para entenderse con las instituciones y escapar del laberinto de las burocracias. Nuestro proyecto, de carácter humanista y cultural, es justo lo contrario: somos trabajadores altruistas que ofrecemos una joya (contenido del museo) que se adapta al edificio ya construido y en desuso. Somos conscientes de que nuestro proyecto es el ÚNICO en el mundo que plantea mezclar un espacio museístico y actividades dedicadas a la construcción POSITIVA de Paz. Otros Museos dedican su espacio a la Paz exponiendo la crueldad de los conflictos. Desde que nuestra Fundación editó su primer proyecto de Museo, en 1993, muchos han sido los que han hablado de Cultura e Paz. Fuimos invitados en el 2000 a las sesiones sobre Lucha por la Paz y Cultura por la Paz de la UNESCO. Los diez años de campaña (2000-2010) parecen insuficientes para un organismo supranacional que debería mantener constantemente esta filosofía. Celebramos que suenan nuevas voces y propuestas relacionadas con Educación o Cultura de Paz, entre nuevas Asociaciones, personajes públicos e Instituciones. Es un mensaje positivo y universal que deberíamos aprovechar para sensibilizar a los responsables públicos de la NECESIDAD de apoyar proyectos como el nuestro. En el plano positivo, disponemos de DOS
PROPUESTAS para instalar el Museo en dos ciudades diferentes.
Con el cambio de equipos de gobierno en muchas ciudades, se han
vuelto a plantear el proyecto a los nuevos responsables. Sin estar
exentos de complicadas y absurdas burocracias, hemos tenido la
ocasión de realizar nuevas entrevistas que plantean nuevas
oportunidades. Siendo condición indispensable del proyecto una
máxima difusión, decidimos postponer la decisión de firmar un
acuerdo en firme hasta no conocer definitivamente la postura de los
Ayuntamientos de las cuatro grandes ciudades pretendidas. |
||||||||||||||||
® Fundación Francisca Mateos, Lucha por la Paz |